martes, 4 de marzo de 2008

Un haiku huérfano

Ayer se me cayó un haiku en el Wok de Bea al curry, así que lo recojo aquí antes de que el pobre se ponga a llorar creyendo que lo he dejado abandonado en mitad del parque. Los haikus son como los cronopios, decía Cortázar. (Es mentira, nunca lo dijo, pero lo pensó).

Tengo un incendio
que me crece por dentro.
Carne de amianto.

6 comentarios:

Beatriz Montero dijo...

Un regalo precioso. Muakiss

peretti dijo...

Cortazar, literatura y buena comida agridulce. Gran combinación para empezar la semana... gran.

Arcángel Mirón dijo...

Desconfío de los haikus.

Belén dijo...

Me pierden los Haikus, me lo puedo quedar? jajajajjajaja

besicos

Arilena dijo...

Bello. Bello.
Un saludo

Enrique Páez dijo...

Gracias Bea, Federico, Arcángel, Belén y Arilena por vuestros comentarios, solicitudes de adopción y sospechas. Mi haiku y yo os lo agradecemos.