Este es un texto falso que sustituye al que había antes, para evitar su copia.
Percuntia tempora fati conqueror, in uentos inpendo uota fretumque; ne retine dubium cupientis ire per acquor; si bene nota mihi est, ad Caesaris arma iuuentus naufragio uenisse uolet. lam uoce doloris utendum est: non ex acquo diuisimus orbem; Epirum Caesarque tenet totusque senatus, Ausoniam tu solus habes». His terque quaterque uocibus excitum postquam cessare uidebat, dum se desse deis ac non sibi numina credit, sponte per incautas audet temptare latebras quod iussi timucre fretum, temeraria prono expertus cessisse deo, fluctusque ucrendos classibus exigua sperat superare carina.
9 comentarios:
Hay!, será de Enrique!...estaba luchando con mi fantasma cuando encontre el microcuento. Y no se quiere ir ¿o no lo dejo partir?
Los fantasmas se quedan para aliviar la soledad, en especial los dolorosos.
Me encanta Enrique. Yo a veces los empujo, con el brazo muevo el aire y quiero creer que las personas que me ven hacer el gesto entienden que en ese momento estoy tratando sólo con mis fantasmas.
No sólo no pueden morir, sino que además te queda el remordimiento de saber que querés que sí puedan morir.
Tendré entonces que convivir con mis fantasmas, será que nos podemos llevar bien algún día?...
Gracias por el susurro que dejaste en mi mundo.
Saludos!!!
Con esa mente de asesino que tienes en el mundo de las palabras, no dudo que en otro cuento hallarás la manera de convertir a los fantasmas en polvo.
Mejor que fluyan solos...que encuentren su destino...Saludos enormes
Pa habennos matao, Enrique: qué bonitooooooooooo.
mejor que se queden en el sotano, bajo llave, no quiero saber de ellos, que no me llamen, que no me busquen. No ahora. Algun dia tambien estare en el sotano y sere un fantasma con besos amarillos colgados de un hilo...
saludos.
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