domingo, 25 de enero de 2009

Vacas a la carrera

Esta mañana, en el Mercado del agricultor de Tacoronte, asistí a una competición de arrastre de vacas y bueyes, aparejados con yuntas, que tenían que remolcar durante doscientos metros un arado en forma de trineo con diez sacos de tierra encima. Un juez con pajarita les cronometraba. Dos bueyes tozudos derraparon en la curva y arruinaron el kiosco de almendras garrapiñadas. El ganado andaba nervioso, y se aliviaba con torrentes de orina antes de cada carrera. Ganó la pareja formada por Clotilde y Bienpagá, primas hermanas y residentes en La Orotava. El entrenador, Rufino Cienfuegos, recibió como premio un pellejo de veinte litros de vino de Icod y tres arrobas de alfalfa fresca para Clotilde y Bienpagá. ¡Viva el alcalde!
Al final, tras los joropos y las coplas canarias,

Todas las canarias son / como ese Teide gigante, / mucha nieve en el semblante / y fuego en el corazón,

carrera de sortijas a caballo, o cómo ensartar en una vara de mimbre una sortija que pende de un hilo. A esa distancia me fue imposible ver la sortija, aunque los entendidos dijeran que era un brazalete. Ganó un guanche color mostaza que dijo ser descendiente de Solimán el magnífico y sobrino nieto de Blacamán, pero me da a mí que mentía como un desfachatado, porque la semana pasada le vi robar carteras a los turistas en la plaza de San Francisco.

11 comentarios:

Beatriz Montero dijo...

Las malas lenguas dicen que la vaca Guasimara, tan presumida ella, se tragó una de esas sortijas con hilo y todo.

Anónimo dijo...

Gracias, Enrique!! Lo estoy pasando genial con los últimos relatos.
Este me encanta, es picaresco.
Besos

Edurne dijo...

Bueno, ese arrastre que viste son las famosas "idi-frogak" de esta tierra.
Esta divertido el asunto, las pobres vacas o los pobres y sufrido bueyes, arrastrando pesadas moles para el regocijo del público con ganas de jarana... si ellos hablaran! Claro, no me extraña que se meen los pobres, es su forma de protesta.

Y en cuanto al descendiente guanche del tal Solimán (sería el Magnífico?)... tal vez fuera una forma de reinventar su vida al margen de las carteras y monederos de turistas despistados, digo!

En cualquiera de los casos, que has vuelto a deleitarnos con tus letras, y eso está más que bien!

Una anécdota:
Tengo un par de alumnos de prácticas este trimestre, ex alumnos míos, ambos dos... Y el viernes me dice Beñat, que así se llama el primero, con un librito en la mano: "Ehhhh, estáis leyendo este libro también, como cuando estábamos nosotros?" "Sí, ya sabes, lo leemos en 6º todos los años" Y le conté que conocía al autor "virtualmente" y blablablabla... y le parecía extrañísimo que se pudiera conocer a un escritor, aunque sólo fuera virtualmente! jejejeje!
El librito en cuestión: "Ekarri nire eraztun astuna, tuntuna", o sea, "Devuélveme el cepillo, pelo cepillo".
Al mes que viene, cuando llegue el próximo, Unai, seguro que me hará la misma observación.
Pa que veas!

Hala, besotes y a seguir escribiendo!

Edurne dijo...

Era "Devuélveme el anillo, pelo cepillo"! Ayyy, cómo andamos Edurne, será por culpa del ciclón que me ha dejado alguna neurona despeinada...! ;)

Belén dijo...

ten cuidado, no sea que te robe algo mas que la cartera...;)

Besicos

Sergi Bellver dijo...

Sé que no tiene nada que ver, pero he leído tu entrada y de repente se me ha ido la mente a Creta o a "La casa de Asterión".

En Madrid ahora tenemos otra competición silenciosa de vacas, detenidas en las calles. No se mean, pero con sus ojos de cartón-piedra vigilan a los carteristas, que aquí son legión. Yo creo que son compinches y les avisan...

Pd: te contesté en mi casa, léelo por si he de ensobrar un libro.

Enrique Páez dijo...

Hice trampa: la foto es de vacas vascas, como bien ha notado Edurne, que sabe idiomas. ¡Es la primera vez que sé de alguien que ha leído la versión del Pelo cepillo en Euskera! Tengo que ir más a menudo a las tamborradas.
Un beso.

Anónimo dijo...

Qué divertida tu entrada de hoy, maestro Páez, mezcla de costumbrismo, humor y energía en movimiento.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

Me ha gustado el guiño, maestro ;-)

Maria Coca dijo...

Me alegro por las vacas!!!! Un premio pensado para ellas, pobrecitas.

Unknown dijo...

Oyeperdonabonito, pero ese guanche es mi primo y es de auténtica sangre marrón, y devuélvele la cartera que le robaste TU.