lunes, 5 de enero de 2009

Queridos Reyes Magos

Herodes ha vuelto a enviar matarifes a las puertas de Belén, y jura que va a terminar de una vez por todas con los terroristas palestinos y sus familias, tanto si se llaman Jesús como si se llaman Abdel. Parece ser que las intifadas se repiten desde hace siglos. Tened cuidado con los controles. ¿Lleváis salvoconductos? No creo que os dejen entrar y salir de Belén con todos esos paquetes colgando de las alforjas. Seguro que no.
Por unos momentos pensé pediros como regalo de Reyes al primer ministro israelí, Ehud Olmert, colgado por los huevos, y con la cabeza aparte, en otra caja. Pero no. Que se quede allí donde esté. No es una cuestión personal, porque si no tendría que pedir también a Bush, Aznar, Blair, Putin y unos cientos más. Son muchas cajas. Demasiados bultos. No me caben en ninguna parte, y además apestan.
Tampoco os voy a pedir la paz en el mundo, porque aún no soy Miss Tenerife, así que no llego a tanto. Os pediría un páncreas nuevo, para dejar de perforarme cuatro veces al día con insulina, pero visto lo visto hasta me parece egoísta. Mejor me quedo como estoy, con diabetes, lumbalgias, miopía y calvicie progresiva. Acepto hasta la letra pequeña.
Bueno, quizá os pida una bolsa de canicas. De las de todo a cien. Las canicas de mi infancia, esferas transparentes con universos de color flotando en su interior, calidoscopios de magia. Quiero una colección de canicas, y un bolón. Un bolón-sol multicolor, con un diámetro doble del de las canicas normales, alrededor del que orbitarán el resto de canicas planetarias. El bolón-rey, el primer ministro de las canicas, será el que reciba los empujones de las canicas proletarias. “¡Bolón, bolón!”, gritaba siempre alguno en mitad del patio, y allí nos juntábamos todos con nuestras canicas pequeñajas a disparar al bolón desde detrás de la raya barricada. El bolón se quedaba quieto, casi arrinconado contra la tapia, hasta que una canica terrorista le zurraba la badana. En ese momento el bolón cambiaba de dueño, y el antiguo propietario perdía un rey a cambio de quedarse con todas las canicas fallidas, los muertos de la intifada. Hoy, como ayer, los palestinos se defienden de los tanques a pedradas, David contra Goliat.
¿Qué para qué quiero jugar a regicidios con canicas? Pues quizá porque me he creído el principio de correspondencia hermética de Hermes Trimegisto: “Lo que está abajo es como lo que está arriba”. Normalmente esa ley la aplican los astrólogos para justificar el correlato entre el movimiento planetario y los enamoramientos o divorcios de los humanos, pero yo lo aplicaré a la batalla entre Israel y Palestina. Espadas como labios: palabras como piedras.

12 comentarios:

plstk dijo...

Gran post, yo a los reyes les pido el fin del horror para este año y mi madre me dice queel horóscopo me da un gran año, así que cruzo los dedos jeeeee
Un besote

Beatriz Montero dijo...

Pues yo si que les voy a pedir la cabeza de Olmert. Ya la tiraremos luego al mar ;)

Edurne dijo...

Yo también firmo esa carta!

Anónimo dijo...

¡Me encanta tu carta Enrique! Si lo hubiera sabido antes le habría escrito yo también a los magos esos para pedirles los boliches (así llaman en Canarias a las canicas) con universos en el interior y el cálido Sol bolón; para hacer presión, para ver si al pedírselo yo, que he sido bueno, me lo traen y puedo regalártelo luego. Porque lo que es a ti...

La verdad es que estoy tentado de pedirles que se quiten la corona, que ya está bien monarquías y autoritarismos, que estamos hartos de reyes y patrias, de dioses y guerras religiosas. Que se quiten la corona y se pongan a jugar a los boliches, o al escondite con las princesas de todas las edades, que me consta que hay muchas y están muy solas. Y están, como yo, deseando jugar.
Un abrazo muy fuerte.
Basilio

josef dijo...

Así es; "hartos de reyes y patrias, dioses y guerras." Terminará alguna vez el ciclo o el ciclo nos succionará en un caos definitivo y magistral... Creo que los humanos somos maestros del caos. Un post excelente! Saludos este año.

Anónimo dijo...

La destrucción o el amor.
Es un estupendo final para tu texto el que has elegido.
Besos, feliz noche de ensueños.

bizarro con interrupciones dijo...

¡Hola Enriquito!

Este año has sido muy bueno así que aprovecho para desearte a ti (y desearle a Bea) que os traigan muchas cosas los Reyes, pese a que habéis intentando despistarles y a lo mejor lo conseguisteis y os dejan los regalos junto al Ambroz. Pero bueno, yo espero que algo por la Orotava también os caiga. Os deseo todo lo mejor y os envío un fuerte abrazo desde Madrid.

Ah, y no te levantes por la noche, que ya sabes que como los Reyes te pillen levantado ya no te traen nada!!

Un fuerte abrazo,

Álvaro

Mi vida en 20 kg. dijo...

Que los reyes te traigan paz y calma.

Bea, ¿para que dejar mierda en el mar?, que se quede donde esta.

Un abrazo y mis deceos de Miss Tenerefi.

Belén dijo...

:)

Lo de la cabeza, mejor que no, dónde las ibas a poner? la cabeza de Aznar no es nada hermosa como para exhibirla jo...

Lo de las canicas mola, cuando quieras nos bajamos a la era y echamos unas partidas...;)

Besicos

Arcángel Mirón dijo...

Los Reyes Magos vienen presenciando guerras y hambre y miseria y peste desde hace dos mil años. Creo que ya están narcotizados por la costumbre.

Raúl dijo...

Primero, agradecerte el detalle de felicitarme el año. Después, alabar tu entrada; bien escrita, certera y ocurrente. Una muy buena entrada, sí señor.

Anónimo dijo...

Otra que esta acá y firma la carta! Excelente post, si Señor!!!