lunes, 10 de agosto de 2009

La dificultad de reencarnarse

Este es un texto falso que sustituye al que había antes, para evitar su copia.
Percuntia tempora fati conqueror, in uentos inpendo uota fretumque; ne retine dubium cupientis ire per acquor; si bene nota mihi est, ad Caesaris arma iuuentus naufragio uenisse uolet. lam uoce doloris utendum est: non ex acquo diuisimus orbem; Epirum Caesarque tenet totusque senatus, Ausoniam tu solus habes». His terque quaterque uocibus excitum postquam cessare uidebat, dum se desse deis ac non sibi numina credit, sponte per incautas audet temptare latebras quod iussi timucre fretum, temeraria prono expertus cessisse deo, fluctusque ucrendos classibus exigua sperat superare carina.

8 comentarios:

Beatriz Montero dijo...

Vaya con la reencarnación, la que está montando el viejeciello. (Fijo que si le ve la bibliotecara le grapa la cabeza, jeje).

Maria Coca dijo...

Y todo por hacer caso de las religiones y por querer hacer las tres únicas acciones por las que en teoría vivimos...

Creo que el protagonista se merece reencarnarse en sí mismo. Méritos no le faltan!

Me encantó, Enrique. Genial.

Una ET en Euskadi dijo...

¡Qué buenísimo relato! Super "enganchante" ¡lo que desconfío yo de los que en todo momento son buenos y felices!,por algún lado terminan explotando.
Aunque no pretendo reencarname, no sabés la de veces que estuve tentada de quemar los libros de Antonio Gala

Feliciti dijo...

Divertida esta parodia de la vida,del ser humano,de las contradicciones del ser humano,etc.
Lo malo es que esta parodia al final no deja de reflejar esa verdad tan humillante,por cierto,muy bien escrita,yo también recordé la biblioteca de Alejandría antes de llegar al párrafo donde la mencionabas.Pues nada que no esté dicho ya pero que conviene ir recordando con ese toque de humor de la tragedia.
Un saludo a todos los comentaristas y a ti especialmente!

Belén dijo...

La verdad es de una lógica plastante...

Besicos

Unknown dijo...

Cuánto trabajo ¿no?,con lo fácil que hubiera sido contratar una empresa de servicios, que ahora las hay para todo. Cuando se reencarne el prota va a estar agotado.

y qué más da... dijo...

Genial. Casulamente hace dos días releía "Una flor amarilla" de Cortazar... Quizá sea una señal y deba ir a comprar unos bidones de gaolina y unas cerillas.
Un abrazo

Elisa Agudo dijo...

Los pelos de punta!!!