Ese es mi reloj, pero no marca esa hora. Ahora es otra. Tú estás desfasado, él está bien. Créeme, lo tengo delante. Lo que estás leyendo tampoco lo he escrito cuando me lees. Hay una asincronía permanente entre el autor y el lector, entre la foto y el que la observa. A lo mejor estoy muerto, y tú no lo sabes. A lo mejor eres tú el que está muerto, y este texto es como aquel cedro de Siberia que nunca nadie ha visto crecer, que cayó partido por un rayo, se pudrió y desapareció, y no hay constancia ni certeza de que haya existido nunca. ¿Te crees mejor que un cedro? No por es desanimarte, pero creo que tú tampoco existes. No te deprimas. Nos pasa a todos. Excepto a mi reloj, que sigue andando.
viernes, 19 de septiembre de 2014
viernes, 5 de septiembre de 2014
Nuevo vídeo del Taller de Escritura: El monólogo interior, última frontera de la consciencia
Nuevo vídeo del Taller de Escritura: El monólogo interior, última frontera de la consciencia. Cómo escribir un monólogo interior. El fluir de la conciencia. La escritura automática. Taller de Escritura Enrique Páez.
http://youtu.be/mGkGsEGVrYI?list=UUOXDbg1Ih3ZiSib9FxIghbw
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