miércoles, 16 de junio de 2010

Joyce, Lezama Lima, Dámaso Alonso y el Bloomsday

Los irlandeses, y muy especialmente los dublineses, celebran hoy el Bloomsday, y recorren las tabernas de Dublín naufragando en cerveza, como hace ya más de un siglo (en 1904) hiciera Joyce a través de su personaje Leopoldo Bloom en Ulyses. Homero habría aplaudido la reinvención (todos los Homeros autores de la Odisea, incluido Homer Simpson). También los cubanos (los que pueden) celebran cenas Lezamianas, en memoria de la comilona contenida en el capítulo VII de Paradiso de Lezama Lima.
“Doña Augusta destapó la sopera, donde humeaba una cuajada sopa de plátanos. –los he querido rejuvenecer a todos –dijo– trasportándolos a su primera niñez, para eso he añadido a la sopa un poco de tapioca. Se sentirán niños y comenzarán a elogiarla como si la descubrieran por primera vez. He puesto a sobrenadar una rositas de maíz, pues hay tantas cosas que nos gustaron de niños y que sin embargo no volveremos a disfrutar”
.
Cualquier excusa es buena para hincharse a beber y a comer, y si el motivo es literario, pues tanto mejor.
Y todo esto me venía a la memoria mientras recordaba unos versos de Dámaso Alonso: "Madrid es una ciudad con más de un millón de cadáveres, según las últimas estadísticas". Cuando yo tenía 15 años me extrañaba que Dámaso Alonso contara los muertos de La Almudena. Solo después de cumplir los 20 me di cuenta de que Dámaso se refería no a los muertos del cementerio, sino a todos esos que caminan por las calles de Madrid, viajan en metro y sufren cada mañana al darse cuenta de que aún están vivos.
Ahora hay muchos más muertos. Cinco o seis millones de muertos, muchos de ellos amontonados en la periferia. Yo ya no muero en Madrid. Prefiero morir junto al mar.

4 comentarios:

Belén dijo...

Muchos de las ciudades que conoces tienen más de un millón de muertos :)

Besicos

leo dijo...

Me has hecho reír con lo de que Dámaso Alonso contara los muertos de la Almudena.
Yo sigo muriendo en Madrid. Fantaseo con morir en otra parte, pero me falta el valor.
Un beso.

Marcos Alonso dijo...

Me encanta esa imagen de muertos vivientes recorriendo la ciudad y practicando la necrofilia.

Un abrazo.

Una ET en Euskadi dijo...

Yo, cuando vivía en Bs AS, también festejaba el Bloomsday en tabernas irlandesas y con irlandeses o similares ¡cualquier excusa era buena para hablar inglés! katxiendie, después, tanto más cerca de las islas británicas, las circunstancias no me permitieron coger ni un libro, ni una palabra en inglés creo haber pronunciado desde entonces
Bonita reseña de bonitos autores

PD: A mi me alcanzaría con morir fuera de España, pero ya no tengo ni las circunstancias ni quizas tampoco el valor (igual que leo...quizás)